Cuando escuchas música relajante podrás conectarte con tus
frecuencias del alma. Para equilibrar tus hemisferios y conectar con tu sistema
interior tanto biológico como psíquico, renovar tus energías positivas y
eliminar tus pensamientos negativos.
A continuación te presento siete curiosidades sobre la
música que seguramente te interesará:
Mejora el vocabulario
Según estudios realizados por la Universidad Northwester,
durante el entrenamiento musical para tocar un instrumento se establecen
conexiones neuronales que mejorarían otros aspectos de la comunicación humana.
Esto explicaría el que muchos niños con formación musical tengan un mejor
vocabulario y una mayor capacidad de lectura, e incluso son capaces de escuchar
mejor una conversación cuando hay ruidos o interferencias que la dificultan.
¿Es buena la música
de fondo?
Aunque no esté científicamente demostrado, escuchar música
mientras desarrollamos una tarea cognitiva reduciría nuestro rendimiento, la
música de fondo solo sería beneficiosa si nos encontramos en un estado de
ansiedad que debamos reducir antes de iniciar cualquier tarea cognitiva de
forma provechosa.
Ayuda para hacer
deporte
Científicos de la Universidad de Brunel demostraron en 2008
que escuchar cierto tipo de música, podemos aumentar nuestra resistencia al
ejercicio físico intenso hasta un 15%. El estudio fue publicado en la revista
Journal of Sport & Exercise Psychology.
Oído izquierdo, oído
musical
Según un estudio realizado por la universidad de California
y la de Arizona, nuestro oído derecho registraría mejor los sonidos del habla,
mientras que el izquierdo, los de la música.
¿La música incita al
alcohol?
No toda, según estudio publicado en la revista Alcoholism:
Clinical & Experimental Research, la música muy alta que puedes escuchar en
los bares incita a beber más alcohol en menos tiempo, el resultado concluye
cuanto más alta, más alcohol.
Música para la
circulación
Científicos del Centro Médico de la Universidad de Maryland
han demostrado que escuchar música puede beneficiar al sistema cardiovascular,
comprobaron cómo el diámetro de los vasos aumentaba un 26% al escuchar nuestra
música favorita (al contrario que la estresante que los contraería hasta un
6%). Los experimentos también concluyeron que al escuchar canciones que nos
invitan a reír; los vasos sanguíneos se dilatan un 19%, mientras que la música
relajante produce una expansión del 11%.
Ojos cerrados, oídos
abiertos
Estudios apoyados por la Universidad de Tel Aviv demostraron
que escuchar música con los ojos cerrados aumenta el efecto emocional que nos
produce la música, al comprobar que aumentaba la actividad de las áreas del
cerebro vinculadas a las emociones que nos produjese cada melodía en
particular.
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